Hay muchas maneras de votar


Nos podemos desgañitar manifestación tras manifestación, podemos hartarnos de criticar a este gobierno, o al anterior, o al otro, o al de más allá (de este, en concreto, me da a mí que no nos vamos a ver hartos nunca).

Podemos insultar a Rossell y a su cohorte de sibilinos pedigüeños y lloricas, podemos hacer huelgas, podemos incluso sumarnos a cada movilización que planteen los sindicatos, al tiempo que podemos criticarlos también, como no, y al 15M, y a quien se tercie.

Podemos inventarnos eslóganes, sentadas, ocupaciones, podemos repartir octavillas, podemos pintar pancartas, podemos poner chinas en los zapatos de los políticos, podemos acusarles de corruptos, exigirles que gestionen bien nuestro dinero.

Podemos gritar y gritar en contra de los recortes, podemos liarla parda, podemos plantarnos eternamente en la calle...

Pero si al día siguiente, o al otro, perdemos el culo por medio punto de comisión en nuestros ahorrillos y no miramos qué hace el banquero con ellos, cuanto manda, cuanto impone, cuanto hiere, cuanto daño nos hace...si todo esto se nos olvida, o no lo queremos ver, y miramos para otro lado, mientras recogemos nuestra cafetera de regalo por nuestra imposición...

O si, tras escuchar a cualquier empresario insultándonos en tanto que trabajadores, nos relacionamos con sus empresas en tanto que consumidores, sin plantearnos no consumirles ni un céntimo...

O si seguimos considerando como el gran símbolo de estatus la riqueza, el dinero, en lugar de considerar lo que realmente es, en la mayoría de las ocasiones: fruto de la opresión de muchos por parte de unos pocos ...

Si sólo pensamos que esto no es más que una cuestión económica o política, si no nos damos cuenta de que -de verdad- todos éstos nos consideran sus enemigos, y ellos SABEN, mucho mejor que nosotros, QUE SIN NOSOTROS y nuestros ahorrillos, y nuestra anuencia con sus símbolos de estatus, y nuestro consumo irracional, NO SON NADA...

Si no nos damos cuenta de que ellos dependen de nosotros infinitamente más que nosotros de ellos, y que a ellos nadie les ha votado, y por tanto nadie les puede hacer irse mediante el voto...y que solo dejándoles solos, sin compartir sus cutres y casposos símbolos de poder "ésto" puede cambiar de verdad...

Si nada de esto pasa, nada bueno nos va a pasar

No salgo de mi asombro

Me sigue asombrando... .

..que tras esa especie de parque temático multitudinario-reivindicativo llamado 15M, con millones de conciudadanos entonando eslóganes tan atractivos como "no nos representan" "psoe pp la misma cosa es"... arrasara el PP, seguido del PSOE en la municipales...

... que el parque se cerrara al gran público cuando se presentía la inminente victoria por goleada del PP en la elecciones generales...

... que todos hablemos de lo mal que está la cosa, y pocos, muy pocos, seamos capaces de ver más allá de las míseras corruptelas de nuestros más "allegados"...

....que haya tanta gente que daría su brazo por que la cosa volviera a cómo estábamos antes de la crisis: empeñados hasta las cejas, con una importante bolsa de especuladores diezmando nuestro territorio, habiendo perdido muchísimo poder adquisitivo, con millones de parados....pero con crédito para seguir creyéndonos clase media, media-alta ...

... que veamos que las soluciones que vienen imponiéndonos desde hace dos años, son las mismas que se imponen a Grecia, país que lejos de mejorar, empeora, y no atemos cabos, y una buena parte de la población siga pensando que no hay otro remedio, ni otra alternativa...

... que veamos, también, que la respuesta popular a dichas medidas, en Grecia, está siendo la que se propone aquí, y no nos demos cuenta de que debemos aportar algo más creativo, que esa respuesta, aún importante, no está modificando en nada el comportamiento de los poderosos, que con esas respuestas ellos ya cuentan...apostaría que hasta en el fondo les divierten...

... que seamos tantos, tantísimos para hablar, para quejarnos, para retroalimentarnos, y tan pocos para pensar, proponer y apoyar...

... ¡¡¡ QUE INVENTEN ELLOS !!!


Contra los abusos de las compañias eléctricas

Campaña por un Consumo Solidario

Te esperamos en REdSISTENCIA

Página del grupo REdSISTENCIA





Manifiesto por un consumo solidario


Los sindicatos han convocado una huelga de consumo para el día 18 de febrero. Los miembros del grupo REdSISTENCIA apoyamos dicha huelga, pero queremos aportar nuestras propuestas para una movilización más general, continua y, a la larga, eficaz.

Esas propuestas se concretan en el “Manifiesto por un consumo solidario”

Manifiesto por un consumo solidario.

Compañer@s trabajador@s,

Nadie ignora la agresión que, desde hace muchos años, venimos padeciendo por parte de todos los estamentos del poder, fundamentalmente el económico. Tras años de salarios congelados, el colectivo de trabajadores públicos, ha visto cómo, se le han aplicado recortes en dos ocasiones en poco más de un año. En estos momentos, la situación se agrava dramáticamente con los recortes en los servicios que se prestan a los ciudadanos.

El resto de trabajadores en toda Europa, pero con mayor virulencia en nuestro país, padece las consecuencias de un aumento continuo del paro, una mengua en sus salarios y condiciones laborales, y serias pérdidas en sus derechos sociales y sindicales.

Y esto no ha hecho más que empezar.

Al mismo tiempo, los trabajadores del sector público sufren una campaña de menosprecio a su trabajo, no desprovista de calumnias y medias verdades, presentándolos frente al resto de los ciudadanos como un grupo de privilegiados, vagos e incompetentes; como unas rémoras que están impidiendo la recuperación económica del país. Esta campaña puede hacerse extensiva al resto de trabajadores, enfrentándolos a los desempleados por el mero hecho de tener trabajo: “Divide y vencerás”. Es un lema militar, que se aplica de modo natural en esta crisis-guerra-lucha de clases.

Al poder les conviene que estemos divididos, que no seamos capaces de fijar nuestros verdaderos objetivos, y que no sepamos discernir quienes son los enemigos en esta lucha. Lamentablemente, lo están consiguiendo.

Sin embargo, los grandes cerebros del FMI y el Banco de España empiezan a advertir que con tanto recorte se retraerá el consumo. Y sin consumo, no podrán arrancar las economías de los países, generando más desempleo. Y -lo que realmente les importa- no se podrá pagar la deuda.

No sería raro que esas mismas instituciones acabaran por acusar a los empleados públicos de desacelerar la recuperación del país. ¿Por qué no iban a hacerlo una vez más? Ya les acusaron de vivir por encima de sus posibilidades. Aún les acusan de ser un lastre para la economía. Y ahora, podrían ser los responsables de la caída del consumo, puesto que, aun viendo mermados sus ingresos, continúan estigmatizados por el sambenito de ser unos privilegiados al mantener sus puestos de trabajo. Acusaciones todas, de la primera a la última, falaces.

Por todo lo anterior, queremos proponeros un cambio en nuestros hábitos de consumo. Consumamos en la medida de nuestras posibilidades, pero hagámoslo de un modo “creativo”, pensando con detenimiento a quién favorecemos con cada compra que hacemos.


Esta es nuestra propuesta:

Consumamos lo que necesitamos pero favoreciendo, siempre que podamos, a los pequeños comercios, negocios y empresas, impidiendo al mismo tiempo, que la Banca siga lucrándose de forma usurera con nuestro consumo.


Si la compra resulta es un poco más cara, debemos pensar que esos pocos euros que ahorramos consumiendo en grandes empresas se detraen, en parte, de las condiciones laborales de sus trabajadores, de las inversiones poco limpias de esas empresas, de la explotación indiscriminada de la agricultura, la pesca y la ganadería. No debemos tolerar que nadie use tu dinero para presionar al gobierno con el objetivo de conseguir mayores beneficios para ellos y mayores recortes para nosotros.

Pensemos también en el colectivo al que –en cierto modo- ayudaríamos. Los autónomos y pequeños empresarios son el patito feo de nuestra sociedad. La patronal los pone por delante en sus negociaciones, puesto que efectivamente son los más desfavorecidos, pero se olvidan de ellos en sus reivindicaciones, que pasan siempre por pedir peores condiciones laborales para los trabajadores. Estas peticiones en nada favorecen al pequeño comerciante, al autónomo, al pequeño empresario que ve cómo le pisotean los mismos que dicen defenderlos, haciéndoles competencia desleal, presionando a la baja con precios inasumibles, imponiendo horarios que ellos no pueden seguir.

Nada pueden imponernos acerca de nuestro consumo. Nuestros conciudadanos, que lo están pasando tan mal o peor que nosotros, se verían favorecidos, y aquellos que dicen defenderlos no podrían decir nada, pues eso es lo que haríamos: defender lo que ellos afirman defender.

Por todo ello, si estás de acuerdo con nosotros:

  • Procura consumir, siempre que sea posible, en los comercios de tu ciudad. Los tienes cerca y aunque gastes algo más, lo estás invirtiendo en calidad de vida para todos. De esta forma no subvencionarás a quien te insulta abiertamente, como el dueño de la cadena Mango o Adolfo Domínguez, entre otros. Los beneficios de estas cadenas los mantienen en una auténtica posición de privilegio desde la que pueden hacer mucho daño a toda la ciudadanía.
  • Si no queda más remedio que acudir a una gran empresa o comercio, intenta averiguar cuáles de ellas tienen mejores condiciones laborales, cuáles explotan menos el medio ambiente, cuáles pertenecen o no a grupos de presión. Intenta no cribar sólo por el precio, porque cualquier euro que ahorremos hoy, puede ser pan para hoy y hambre para mañana.
  • Procura comprar en aquellos comercios o empresas que facilitan el consumo a los desempleados, mediante descuentos o facilidades en el pago. No hay demasiadas aún, pero estamos convencidos de que, si con nuestro apoyo facilitamos su labor y la difundimos, cada vez habrá más.
  • Trata de pagar siempre en efectivo, sobre todo en el pequeño comercio. Conseguiremos dos objetivos: que el comerciante no tenga que pagar comisiones por la venta y que su banco deje de ganar dinero con operaciones a crédito por las que nos cobran intereses que superan la usura.
  • Plantéate cambiar de banco. Busca uno que no invierta en asuntos sucios como especular con alimentos, presionar con la deuda de un país o invertir en armas. La banca ética puede ser una opción, pero no es la única. Hay que informarse, porque no toda la banca es igual. Si somos clientes de un banco cuyos dirigentes aconsejan la reducción de más prestaciones sociales o laborales, debemos plantearnos recortarles a ellos sus beneficios.

En nuestras manos está. Podemos conseguirlo. Podemos poner nuestro pequeño grano de arena, humilde, pero creativo, social y solidario.

HAZ DEL CAPITALISMO TU CLIENTE